Javier Milei de la Libertad Avanza ganó el balotaje y será presidente. Este personaje fascista, negacionista, planteó privatizar la salud y la educación, así como dolarizar la economía, una reforma laboral y jubilatoria contra los trabajadores. Contrario al movimiento de Mujeres y Disidencias y negador del cambio climático. Pero el triunfo no le otorga automáticamente los recursos políticos para aplicar su rabioso programa antiobrero y represivo. Ya dio pasos hacia acuerdos con la burocracia sindical, pero esto es explosivo respecto de las bases del movimiento obrero. Hay diferencias económicas con el macrismo. Milei no tiene gobernadores propios, ni intendentes, tampoco tiene una bancada propia en el Congreso que le permita hacer avanzar su agenda por lo cual recurrirá a una combinación de pactos parlamentarios, decretazos, y plebiscitos. Rápidamente veremos como sus propuestas no hacen más que agravar la situación ya inaguantable. Para avanzar deberá primero pasar la prueba de un choque con una fuerte reacción popular en las calles.
El primer responsable del resultado es el gobierno actual que ha llevado al pueblo a una situación de crisis insostenible, gobernando para el FMI, agravando la pobreza y la indigencia. Ahí se instala la bronca que canalizó el libertario. Con el agravante de la incorporación del macrismo al próximo gobierno, el otro gran responsable de esta miseria.
La transición que se abre hasta el 10 de diciembre tiene características convulsivas, en un cuadro de bancarrota económica de fondo, al borde de una hiperinflación, con las reservas en negativo y el sistema bancario fuertemente expuesto a una deuda pública insolvente y, desde luego, a una mega devaluación aún cuando Milei postergue su planteo de dolarización. Viene una mega devaluación muy pronto y ninguno quiere pagar el costo político. Por eso Massa amaga con renunciar antes. Esta devaluación se sumará a la destrucción de los salarios y las jubilaciones que ya vienen fuertemente golpeados, lo cual plantea tomar medidas urgentes en defensa del ingreso.
Para los trabajadores se plantea un desafío enorme: hacer frente a un gobierno derechista que (como ya sucedió con Macri) tendrá colaboración de la dirección del peronismo. Para enfrentarlo será necesaria la unidad de los trabajadores y construir una verdadera alternativa independiente y de izquierda. Y, fundamental, superar la burocracia sindical cuya política de entrega frente al ajuste en curso ha contribuido a la victoria del facholibertario. El plan de Milei solo va a avanzar si no hacemos nada, si nos resignamos, si no luchamos. Llamamos a los trabajadores a debatir y organizarse desde abajo, unir a ocupados y desocupados, junto a todo el pueblo para enfrentar en las calles a este nuevo gobierno reaccionario y anti obrero.
Partido Obrero – Frente de Izquierda Unidad