Miles se movilizaron contra Bolsonaro en más de 160 ciudades de Brasil

Más de 160 ciudades de Brasil fueron escenario de movilizaciones contra el presidente Jair Bolsonaro en el marco de la campaña “Fora Bolsonaro”, a la que se sumó el tradicional “Grito de los Excluidos”. Esta jornada, que repiten cada año diferentes organizaciones sociales y políticas brasileñas, denuncia las desigualdades y las demandas incumplidas por el poder político. Los actos de protesta sumaron este año el repudio a la actitud reaccionaria de Bolsonaro, la gestión del coronavirus y el elevado costo de los alimentos básicos, y tuvieron como epicentro las ciudades de Brasilia, Río de Janeiro y San Pablo. El martes Brasil celebró un nuevo aniversario de su independencia en un contexto de enorme tensión frente al golpismo del presidente y el apoyo de sus seguidores más reaccionarios en las calles.

“La calle de Brasilia no es solo para los fascistas, no es solo para los autoritarios”, gritaban los manifestantes que participaron de la 27ª edición del Grito de los Excluidos. Miles de brasileños se reunieron desde las nueve de la mañana en la Torre de Televisión, ubicada en el centro de Brasilia, para exigir la renuncia de Bolsonaro. Ese sitio fue reservado exclusivamente para los grupos opositores, mientras que los seguidores del mandatario se concentraron en la Explanada de los Ministerios, la avenida que concentra las sedes de los tres poderes.

Estudiantes y representantes de movimientos sociales y ambientales, sindicatos y partidos políticos asistieron a la masiva protesta. Los manifestantes desplegaron pancartas pidiendo el juicio político a Bolsonaro, a favor del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y en contra del marco temporal de tierras indígenas, una medida legal que proponer reconocer como tierras ancestrales solo aquellas que estaban ocupadas por ellos cuando se promulgó la Constitución de 1988.

“Feijão sim, fuzil não” (“Porotos sí, rifle no”), rezaba uno de los carteles más repetidos de la jornada. El pasado 27 de agosto Bolsonaro alentó a la población a armarse y llamó “idiotas” a quienes dicen que es mejor comprar porotos que rifles. Los manifestantes repudiaron la inflación creciente en el país y el aumento de la canasta básica de alimentos, siendo el frijol una de las bases de la alimentación diaria brasileña.

Con información de P/12